Se supone que en Extremadura todos los kilómetros que componen la línea de ferrocarril entre Badajoz y Plasencia estarán electrificados el año que viene. Voces críticas cuestionan que se cumpla este compromiso de que sea una realidad en 2020 pero, si así fuera, surgiría otro problema en el trayecto hasta la capital madrileña. La línea Madrid-Extremadura solo está actualmente electrificada entre Madrid y Humanes, es decir, en una pequeña parte al principio del trayecto.

En el tramo que discurre por Castilla-La Mancha no hay proyecto de electrificación a la vista; y en el trayecto entre Talayuela y Plasencia tampoco hay una fecha clara para que llegue esta mejoría del servicio ferroviario.

¿Qué ocurrirá entonces si en 2020 sí se cumple la promesa entre Badajoz y Plasencia? Desde Adif explican que existen trenes híbridos que permitirán completar ese recorrido. Eso significa que se necesitarían nuevos trenes. Bien trayéndolos de otras comunidades o bien adquiriendo nueva maquinaría, pero sería un proceso más complejo. Ya lo dejó claro el ministro de Fomento, José Luis Ábalos: «Me gustaría ir al supermercado y traerme un tren, pero no se hace así. Hay que licitarlo y construirlo, y vienen a ser dos años».