«Si dejaran de recibir en este momento la principal fuente de ingresos de su hogar, ¿durante cuánto tiempo podría hacer frente a sus gastos corrientes sin tener que pedir prestado o cambiar de casa?». A esta pregunta, incluida en la Encuesta de Competencias Financieras (ECF) del Banco de España, un 4% de los encuestados en Extremadura responde que no llegaría a una semana y otro 5% que su colchón financiero les alcanzaría solo para entre ocho días y un mes. Es ahí, en el mes, donde normalmente se sitúa el listón a la hora de establecer qué hogares son vulnerables económicamente, precisa el informe del supervisor, ya que esta es la frecuencia más habitual con la que se pagan salarios y ayudas públicas.

En otro 12% de hogares extremeños se asegura que podrían afrontar los gastos corrientes —en los que queda incluido también el pago de préstamos— a lo largo de entre uno y tres meses en caso de no contar con su vía de renta fundamental. Es la misma proporción que quienes consideran que lo harían de un trimestre a medio año. Por último, casi dos terceras partes, un 64%, superaría los seis meses.

La vulnerabilidad es considerablemente más elevada entre quienes residen en hogares con rentas más bajas. Con datos nacionales, entre aquellos donde no se superan los 14.500 euros anuales llega a ser del 30%, por solo del 2% entre quienes tienen rentas superiores a 44.500 euros.

MEJOR QUE LA MEDIA / La proporción extremeña de hogares vulnerables es inferior a la media española, que se sitúa en el 15%. Solo es peor que la del País Vasco (8%), y está al mismo nivel que las de Aragón, Cantabria y Castilla y León. Por contra, en Andalucía es del 25% y en Canarias del 23%.

A la hora de explicar estas diferencias, la encuesta del Banco de España, elaborada con datos del 2016 pero dada a conocer a finales de mayo pasado, únicamente apunta que es preciso tener en cuenta la distinta incidencia que tiene en cada región el desempleo y la rotación laboral. Esto, junto a la elevada proporción de hogares con ingresos bajos que hay en la región, harían en principio más previsible que la situación fuese peor en Extremadura que en el resto de España.

El hecho de que no sea así quizá quedé explicado, al menos en parte, en otro de los apartados de la encuesta del Banco de España, el que se ocupa de cuántos hogares han tenido gastos por encima de los ingresos en el último año. En Extremadura eso sucede en un 23% de los casos, cinco puntos por debajo de la media. Pero además, interrogados sobre qué es lo que hicieron estos hogares la última vez que tuvieron ‘déficit en sus cuentas’, únicamente un 7% dice haber recurrido a un crédito con garantía real o a una tarjeta de crédito y un 4% a un préstamo personal (incluidos los empeños). En ambos casos son los segundos datos más bajos del país. Con un 12%, tampoco se alcanza el promedio nacional tanto en el uso no autorizado de descubierto y en posponer pagos como en los créditos informales (pedidos a la familia o amigos), con un 29%. Por contra, se supera en lo que atañe a quienes salieron del paso tirando de sus ahorros, con un 58% (al ser una pregunta con respuesta múltiple los distintos modos de financiarse pueden superar el 100%).

LOS QUE AHORRAN / Por otro lado, algo más de la mitad de los extremeños (un 55%) asegura haber ahorrado en el último año (61% de respuestas afirmativas en España). El modo de ahorro más frecuente, mencionado por el 63% de quienes ahorran, consiste en acumular fondos en una cuenta corriente, aunque sorprende el importante porcentaje de individuos que lo hace fuera del sistema financiero, con un 37% de la población que ahorra en metálico (un 38% en todo el país). «En distinta medida, este modo de ahorro se observa en prácticamente todos los grupos de edad, educación o renta, alcanzando el 53% entre los desempleados o inactivos», se puntualiza.

Asimismo, un 12% de extremeños deposita su dinero en cuentas de ahorro, mientras que un 8% menciona haber contribuido a su plan de pensiones en los últimos doce meses y un 4% a un fondo de pensión, en todos los casos por debajo de la media española.