La conflictividad en los centros educativos extremeños ha descendido ligeramente en los últimos años pero la situación de este colectivo sigue siendo preocupante. Así lo demuestra una encuesta elaborada por el sindicato CSI-F realizada a casi 1.500 maestros y profesores de la región, que asegura que el 75% de los docentes han sufrido alguna vez faltas de respeto en el aula y más de un 30% han sido amenazados. Se trata de hechos conflictivos de baja intensidad los que principalmente se suceden en la región, pero que "generan en el profesorado un número importante de bajas por enfermedad de tipo psicológico", recoge el informe.
Pero esta encuesta a parte de reflejar la situación actual de conflictividad en las aulas, revela que se está abordando la problemática de manera acertada a juzgar por los resultados de esta misma encuesta realizada en el 2006. "Aunque quedan muchas cosas por hacer, las medidas puestas en marcha en los últimos años tienen resultados positivos", según el presidente de Enseñanza del sindicato, Adrián Vivas, que esta mañana dará en las jornadas El modelo educativo extremeño , que ayer inauguró la consejera en Badajoz. Las medidas a las que se refiere Vivas, adoptadas por la Consejería de Educación, sindicatos, profesores, padres y madres de alumnos y la Fiscalía son la creación de un observatorio regional, planes de convivencia de los centros, protocolos de intervención inmediata,... Pero detrás de esta leve mejora también está la actuación ante las agresiones ocurridas en el 2008 en Don Benito o Moraleja, "que se han juzgado de forma inmediata y en los que se ha actuado de oficio". "La gente se lo piensa ahora", dice.
Pero el resultado podría ser mejor. Una vieja reivindicación de CSI-F, la creación de un registro de hechos conflictivos, es una de las medidas "necesarias para diagnosticar con detalla la enfermedad y establecer un tratamiento adecuado", explica Vivas, que se muestra preocupado por una situación que parece no variar: el 14% de los profesores ha sentido miedo al entrar en el aula. "Es un dato a tener en cuenta por la frustración que crea en el docente".
