La organización agraria UPA-UCE de Extremadura ha denunciado este miércoles que algunas centrales hortofrutícolas "manipulan" el mercado, ya que comercializan mercancía que "es desechada" para pagársela a los agricultores por su calibre, pero que luego sí se pone a la venta.

En una rueda de prensa celebrada en Mérida, el secretario general de esta organización, Ignacio Huertas, ha asegurado que algunas de estas empresas "actúan más como piratas" y ha pedido a los agricultores que "no se dejen engañar" por aquellos que lo que quieren es especular con estas acciones para bajar los precios.

A modo de ejemplo, ha detallado que al agricultor se le comunica que ciruelas con un calibre de 35 milímetros no son aptas para su venta y, por tanto, no se abonan "porque se consideran inútiles", pero después se puede comprobar que están en la línea de venta de supermercados a 2,59 euros el kilo.

Según ha dicho, estas acciones perjudican "y son un fraude" tanto al mercado como a los agricultores, y ha rechazado que las centrales hosrtofrutícolas justifique una bajada en las exportaciones, por ejemplo, a Brasil (cuyo mercado esta cerrado), para pagar menos y decir que es que el producto no tiene salida.

Además, ha informado de que la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) mantiene abierto siete expedientes de investigación a cinco centrales extremeñas por no hacer contratos o por "saltarse" los plazos de pagos.

En este sentido, ha recordado que la nueva normativa recogía un incremento de la cuantía de las sanciones, que pueden llegar hasta los 600.000 euros, y permite la difusión del nombre de las empresas que sean multadas, por lo que ha anunciado su intención de que, de confirmarse las mismas, harán publica su identidad.

Ignacio Huertas también ha anunciado que trasladarán al Ministerio de Agricultura su petición de que no se puedan comercializar fruta de calibre inferior a 40-50 milímetros, ya que por debajo de ese calibre no se va a pagar.