El secretario general de UPA-UCE, Ignacio Huertas, trasladó ayer a la subdirectora general de Ordenación Normativa del Ministerio de Trabajo, Consolación Rodríguez Alba, los problemas que está generando el registro horario en los trabajo en el campo. Según explicó, el sector agrario tiene peculiaridades que difícilmente se adaptan a un horario rígido preestablecido, dado que depende de muchas circunstancias. «No ponemos en duda el cumplimiento de ninguna norma de registro o control, únicamente pedimos que ésta se adapte a las circunstancias reales del campo», defendió. La representante de Trabajo la trasladó que el objetivo de a norma es que exista un registro fiable y que con esas premisas, cualquier modelo que las cumpla será válido. Trabajo mantiene que el registro horario no debe cambiar los patrones de las jornadas de trabajo.