La organización agraria UPA de Extremadura denuncia que la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) ha actuado de forma negligente y dando poca información a los agricultores y ganaderos en los desembalses, lo que ha ocasionado pérdidas económicas en explotaciones e infraestructuras.

UPA critica la gestión de la CHG "que hasta que los pantanos no han superado el 90 por ciento de su capacidad no han comenzado a desembalsar", lo que ha provocado que miles de explotaciones sufran las consecuencias.

El secretario general de UPA-UCE Extremadura, Ignacio Huertas, solicita a la Consejería de Agricultura que investigue la actuación de la CHG y delimite responsabilidades ante las pérdidas adicionales que han tenido agricultores y ganaderos como consecuencia de la mala gestión de este organismo.

UPA-UCE insiste en la poca información que han recibido agricultores y ganaderos acerca de las consecuencias de las intensas lluvias y considera necesario que en estos casos el Gobierno y la Confederación se coordinen "para ofrecer la máxima información al respecto para evitar causar más daños".

Respecto a la situación actual de la agricultura en la región, UPA considera que es pronto para hacer una valoración cuantitativa de las pérdidas, pero señala que la mayoría de sectores se han visto afectados por la lluvia.

Así, señala que miles de hectáreas de frutales permanecen inundadas como consecuencia de las crecidas de ríos y afluentes a causa de desembalses simultáneos, especialmente en la zona de Vegas Bajas.

Además, indica que por las lluvias se ha retrasado la polinización de las abejas, lo que favorece la aparición de plagas y enfermedades y que en cultivos como el tomate o la sandía, la lluvia ha retrasado las tareas de siembra, lo que supondrá una pérdida de las plantas en los semilleros y una concentración de producción que generará problemas de entrega a la industria transformadora.

Este retraso también afectará a otros cultivos como el maíz, el girasol, el garbanzo o el tabaco.

UPA demanda, ante la previsión de que las precipitaciones continúen, que la administración regional ponga en marcha un seguimiento de los daños y exija responsabilidades a la CHG ante las cuantiosas pérdidas.