El presidente de la Junta de Extremadura, Guillermo Fernández Vara, destacó ayer el papel que los grupos de acción local han tenido en el desarrollo de la región, «fundamentalmente porque han sido uno de los elementos que más ha servido de aglutinador y articulador de la convivencia».

El líder del Ejecutivo hizo estas declaraciones en Valdastillas, donde participó en el acto conmemorativo del 25 aniversario de los Programas de Desarrollo Rural Leader en Extremadura. 25 años de desarrollo rural, a través de la metodología Leader, en los que se han creado más de 7.500 puestos de trabajo y se ha contribuido a mantener más de 15.000 empleos, correspondiendo aproximadamente el 35% a mujeres y el 10% a jóvenes menores de 25 años. Más de 8.000 nuevos proyectos se han atendido en este periodo, con un global de inversión próximo a los 500 millones de euros, informa EFE.

Para Fernández Vara, el Leader es «una historia de éxito, sin siglas y con el trabajo de mucha gente». «Cuando se decide que la metodología Leader empiece a formar parte de nuestras vidas como algo habitual, fue una sabia decisión que nadie nos podemos apuntar, porque surgió de un proceso de participación que yo creo que es modélico», dijo.

En su opinión, la creación de los grupos de acción local ha sido uno de los elementos «que más ha servido de aglutinador y articulador de la convivencia» en Extremadura. «La red educativa y la sanitaria fueron muy importantes, pero alrededor de los grupos de acción local se desarrolló todo lo que tenía que ver con la economía y la innovación», afirmó.

El presidente recordó que los grupos de acción local se idearon en los 80 como respuesta al despoblamiento tan brutal que hubo a lo largo de los años de la emigración. Ahora, la realidad es distinta pero los problemas son similares, lo que a su juicio hace necesario «replantear el futuro porque vuelve a haber un riesgo claro de despoblamiento a consencuencia de la inmigración a las ciudades».

En este sentido, Vara animó a todos los actores del desarrollo rural a introducir los cambios que sean necesarios «para hacer las cosas bien, porque lo que sirvió para ayer, igual no sirve para mañana», concluyó.