El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, resalta la importancia de las redes sociales en el "perfeccionamiento de la democracia" e insta a "no tener miedo" a "una mayor y mejor libertad de expresión y participación de los ciudadanos". Así se expresa durante la inauguración de las jornadas Política y Sociedad del Conocimiento: Las redes sociales y el empoderamiento de la ciudadanía, que organiza la Asociación Comunidad de Redes de Telecentros, según recoge la agencia Efe.
En este sentido, Vara destaca la importancia de la realfabetización tecnológica, que impone internet y que obliga a replantarse una actualización de conceptos y del manejo de herramientas. Por ello, menciona la "revolución silenciosa" que en política suponen las redes sociales, ya que "permiten llegar a más gente pero también que más gente llegue a los políticos", no sólo cuando llegan las elecciones, "para decir lo que uno piensa", con una mentalidad de mayor cooperación y corresponsabilidad.
Fernández Vara recuerda que el próximo 25 de enero su blog cumplirá tres años, con unas 500.000 entradas, y resalta la importancia que para él tienen las opiniones de quienes participan en él, ya que permiten incorporar "miles de matices".
Por ello, se muestra convencido de que no es más fuerte quien más seguridad tiene en sí mismo, sino "quien tiene más capacidad de dudar, interrogarse y preguntar", de ahí la importancia de las aportaciones que los ciudadanos realizan a través de internet, como las 18.000 propuestas que han planteado para la futura Ley de Educación de Extremadura.
El presidente subraya también el "cambio en profundidad" que suponen las redes sociales en el ámbito personal, "con un mestizaje en las relaciones como nunca se había producido antes en la historia", lo que genera "un mundo distinto".
De igual forma, Vara considera las nuevas tecnologías como "una magnífica terapia contra la enfermedad del individualismo", lo que a su juicio supone un cambio del modelo de valores importante para superar la crisis y que ésta no vuelva a repetirse.
Sin embargo, alerta del riesgo de "exclusión" de quienes no tienen acceso a estas herramientas y, por ello, apuesta por la necesaria cooperación con otros países "en alfabetización tecnológica, sin tener resuelto aún el problema del hambre".
