"¡Anda! De defender la refinería a apostar por la economía verde", le decían ayer a la salida del hemiciclo a Guillermo Fernández Vara. Y es que al presidente extremeño le dio por este color durante el Debate del Estado de la Región. Quiere que en la comunidad haya emprendimiento verde, trabajo verde, economía verde, cultura verde... Todo verde. ¡Y que sea referente nada menos que mundial! Parecía más bien un discurso propio de EQUO que del PSOE.

Han tenido que venir dos investigadores californianos a hablar de la dehesa para que Vara se convenza de que nuestros campos no sirven sólo para criar cerdos. El mismo lo dijo.

Fue la propuesta que más destacó en un discurso en el que si bien quiso huir del efecto tómbola que le achacaba a Monago (quien repartía regalos por doquier, aunque fueran insignificantes), por poco acaba teniendo efecto somnífero. Duró apenas una hora, pero fue denso y monótono.

FORMA Y CONTENIDO Y no sólo por la forma (Vara no le termina de coger el punto al tono parlamentario y un político está para proponer, pero también para saber comunicar y emocionar); si no por el contenido: la estrategia verde que planteó, esa gran apuesta, fue demasiado amplia, sin concreciones, sólo una idea en abstracto que dejó a los asistentes un poco confusos.

Antes de que se iniciara el debate, sus señorías charlaban animadamente en la puerta del hemiciclo. Guillermo Fernández Vara, que no perdía la sonrisa en ningún momento, saludó con un efusivo beso a María Victoria Domínguez (C's).

El debate arrancó con ese toque humano que el presidente extremeño siempre quiere transmitir. Esta vez, con el recuerdo a los dos menores de origen marroquí que fueron descubiertos el pasado sábado viajando de Badajoz a Navalmoral en los bajos del autobús (en la ruta que recorría Lisboa-Madrid).

En general fue un discurso de contenido muy social, donde la palabra desahucio apareció en numerosas ocasiones y en el que se acordó de los parados de larga duración (pero no de los trabajadores pobres que, según denuncian las ONG, cada vez son más en Extremadura).

Recordó todos sus compromisos, como el de 'una persona, un cargo', a excepción del de senador por designación de la Asamblea, lo que provocó la risa de los diputados de Podemos Alvaro Jaén e Irene de Miguel.

TRIBUNA DE INVITADOS Había varios sitios vacíos en la tribuna de invitados (¿a quién se le ocurre hacer un debate en vacaciones?). No obstante, allí estaban el portavoz de CCOO, Julián Carretero; su homóloga de UGT, Patrocinio Sánchez; el representante de CSI-F, Benito Román; y el secretario general de la patronal (Creex), Javier Peinado, que fue el primero en llegar.

También acudieron a escuchar el discurso los cuatro diputados nacionales del PSOE: por Cáceres, Pilar Lucio y Cesar Ramos; por Badajoz, Marisol Pérez e Ignacio Sánchez Amor.

En la tribuna estaban, igualmente, el presidente de la Diputación de Badajoz, Miguel Angel Gallardo, quien seguía con mucha atención el discurso; su homóloga en Cáceres, Rosario Cordero; y representantes del SIEX (Socialistas Independientes de Extremadura), como Antonio Vélez.

El asesor de Fernández Vara, Cesar Calderón; el director general de Extremadura Avante, Miguel Bernal; la diputada nacional de Podemos, Amparo Botejara; su marido y concejal de la misma formación política en Badajoz, Remigio Cordero; y Luis García-Borruel, edil de Ciudadanos en el Ayuntamiento pacense y quien no se pierde una, acudieron también a esta cita en el hemiciclo que hoy dará que hablar. Y mucho.