El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, prevé que las dos provincias extremeñas avancen juntas en el plan de desescalada que ha planteado el Gobierno de España, a su juicio el modelo «más completo» de cuantos se han conocido hasta ahora. «Lo ideal es que la progresión la pudiéramos hacer todos juntos y es por lo que vamos a trabajar», señaló este miércoles en rueda de prensa. El líder del Ejecutivo aplaudió la estrategia estatal porque combina fechas con actividades permitidas y factores de cumplimiento, algo que no han hecho otros países como Francia o Italia. No obstante, reconoció que se trata de un plan «perfeccionable» y confió en que su falta de precisión en algunos aspectos se corrija en las sucesivas órdenes ministeriales.

«Tengo tantas preguntas como puede tener el ciudadano», aseguró Fernández Vara. Según explicó, una vez que arranque la próxima semana la fase 0, «lo más urgente» será completar los indicadores para que Extremadura pueda pasar a la fase 1. A la espera de una mayor concreción, el Gobierno evaluará la capacidad del sitema santario, tanto en Atención Primaria como hospitalaria y las camas de UCI disponibles; los nuevos contagios por habitante; las medidas de protección colectiva en el trabajo, el comercio y el transporte público, y los datos de movilidad y socioeconómicos.

Fernández Vara cree que tanto Cáceres como Badajoz van a cumplir y pasarán a la fase 1 el 11 de mayo. Todo dependerá de los nuevos contagios, a su juicio el parámetro más complicado. En un principio el virus afectó más a la provincia cacereña, pero en este momento considera que la situación «se ha estabilizado» y evaluando los datos por semanas, los casos crecen de forma homogénea en todo el territorio regional. Solo si ambas provincias no pudieran ir de la mano, la Junta propondrá una desescalada diferenciada por áreas sanitarias.

Fortalezas

Entre las fortalezas de Extremadura para afrontar la desescalada, el líder del Ejecutivo destacó la «potente» red de Atención Primaria, con más de 400 consultorios que tendrán un papel clave para la detección precoz de los nuevos casos y el aislamiento de sus contactos. Además, la presión hospitalaria se encuentra en estos momentos por debajo del 50% en todas las áreas, y si bien en Cáceres el número de pacientes en UCI es superior, «hay muchas camas disponibles» gracias a que la ciudad cuenta en estos momentos con tres hospitales abiertos. Son en total 168 las plazas de cuidados intensivos con las que cuenta la región, que además estaría en disposición de llegar hasta las 200.

Entre las «debilidades compartidas», se refirió al sector turístico, uno en los que Extremadura se había apoyado para salir de la crisis y que en los últimos años estaba presentando un crecimiento exponencial. Al respecto, Fernández Vara instó al Gobierno a precisar también qué actividades culturales se podrán llevar a cabo durante el verano (el Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida sigue en el aire) y apostó por una campaña de promoción «fuerte» para paliar los efectos de la crisis sanitaria.

Por último, cabe destacar que el presidente ha citado hoy a los grupos de la oposición para la toma de «decisiones compartidas» en la fase de desescalada. El encuentro está convocado a las 12, una vez finalizado el pleno. Fernández Vara insistió en que «va a haber que cambiar prioridades» en el gasto autonómico, pero sin caer en los recortes que se aplicaron en la crisis del 2008 y con especial atención a los más vulnerables. Respecto a los ajustes que habrá que llevar a cabo, consideró «prematuro» concretar medidas, aunque sí señaló que todo el mundo debe ser consciente de que «serán esfuerzos compartidos y mayores para quienes más tengan».