El presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara, vincula un hipotético trasvase al Segura desde el embalse cacereño de Valdecañas, en la cuenca del Tajo, al cumplimiento de una serie de compromisos que existen con la región en materia de obras hidráulicas. Según recoge la agencia Efe, Fernández Vara vuelve a pronunciarse sobre esta cuestión en el Pleno del Parlamento autónomo, a una pregunta del presidente del PP de Extremadura, José Antonio Monago, sobre la estrategia de la Junta con relación a este trasvase del Tajo Medio.

Vara reitera su interés en hacer compatible siempre los intereses de la región con los de España, aunque aclara que nunca aceptará nada que pueda perjudicar a Extremadura, algo que saben los regantes del Tajo.

El jefe del Ejecutivo regional insiste que antes de aceptar ese hipotético trasvase "hay que plantear que se cumplan los compromisos que hay con Extremadura", como las obras de la presa de Monteagudo o el recrecimiento del embalse de Rosarito, "donde por cierto cada año pasan por allí 1.500 hectómetros cúbicos, que no se quedan, sencillamente porque sólo caben 82".

Además, cita otras actuaciones comprometidas con la región como el trasvase del Tiétar a la presa del Navalcán o la construcción del embalse de Las Gargantas e insiste en que estos proyectos se pondrán "encima de la mesa cuando llegue el momento".

Fernández Vara defiende su disposición a hablar sobre el reparto del agua porque "a Extremadura por encima de cualquier otra consideración -ha destacado- le interesa que nadie pueda utilizar contra nosotros argumentos que salen de nuestra falta de coherencia".

Por su parte, José Antonio Monago critica que Vara, a diferencia de otros presidentes autonómicos, esté dispuesto a hablar de esta cuestión cuando aún no existe un estudio en torno a lo que supondría un trasvase desde Valdecañas. Así, atribuye al socialista "vocación de presidente del Gobierno" y le acusa de "mirar más para fuera de la región que para dentro". Por ello, Monago pide "prudencia" en este asunto porque "no quiero que a mi presidente y con él, a todos los extremeños, nos tomen el pelo".