El verano es un lujo para muchos: el sol, las vacaciones, los baños en las piscinas. Pero también trae días de excesivo calor. Cada año, las altas temperaturas ponen en riesgo a muchas personas, y sobre todo, a las más vulnerables: ancianos, niños y enfermos.

"Se ponen hasta la chaqueta", dice una cuidadora. Y es que, el aire acondicionado, instalado en varias salas, no les hace muchas gracia a los ancianos de la residencia Hermanitas de los Pobres de Cáceres. El calor estos días es insoportable, y el mejor método para combatirlo es estar en un lugar fresco, así que "les pongo el aire sin que se enteren, no les gusta".

Los paseos cambian de horario, porque las altas temperaturas les afectan mucho, sobre todo, a aquellos que están enfermos, como afirma Clementa, una de las porteras: "Mi marido lo está pasando muy mal, porque es diabético y el calor le sienta fatal, pero es tan callejero que aprovecha para salir por las mañanas temprano, aunque ayer no salió por el calor". Pero a Felisa y a Carmen, dos de las señoras alojadas en la residencia, nada les priva de su paseo diario, "nosotras salimos a pasear por las tardes al patio cuando los aspersores comienzan a regar el jardín, que se está fresquito". Las noches son una odisea para algunos, especialmente para Felisa: "Me duermo tarde, rendida por el calor".

El agua y el abanico son los aliados fundamentales de estos ancianos, pero a veces, "hay que insistirles mucho porque ellos nunca tienen sed". Una alimentación ligera y abundante en líquidos, es lo que las cocineras sirven a sus comensales. "El gazpacho es lo que mas apetece ahora", dice Antonia, además de purés de frutas, helados, zumos, batidos, e, incluso, gelatinas.

Y es que el ascenso de las temperaturas esta semana "se ha notado bastante", comenta Félix Simón. Aunque Sanidad ha desactivado la alerta por ola de calor, continúan las altas temperaturas.

Pero estos ancianos tienen la suerte de estar muy bien atendidos. No ocurre lo mismo en el caso de algunas personas mayores que viven solas, a las que presta una especial atención el servicio de Cruz Roja, que ha habilitado un sistema para controlar a las personas más vulnerables. "Los interesados se inscriben en unas agendas, a través de las cuales nos ponemos en contacto con ellos por teléfono periódicamente, para controlarlos y darles recomendaciones para combatir las altas temperaturas", se explica según el jefe de prensa de Cruz Roja,.

La inscripción se realiza en los ayuntamientos, Cáritas, Cruz Roja o en el 900 222 299. Por el momento, no han tenido que intervenir por situación de riesgo, porque todos los inscritos están siguiendo adecuadamente las recomendaciones para combatir el calor.