Extremadura descarta pedir con antelación el paso a la fase 3 del plan de desescalada del Gobierno central. Así lo aseguró ayer el consejero de Sanidad y Servicios Sociales, José María Vergeles, quien apuesta por agotar los 14 días marcados para pasar de una fase a otra porque «las carreras no son buenas y hay que ser prudentes». «La proporcionalidad de las medidas tienen que ver con una desescalada a un ritmo adecuado para ver cómo se van comportando los datos», subrayó.

La región pasará mañana a la fase 2 del plan, lo que permitirá la realización de más actividades sociales, económicas, lúdicas y de culto, así como «un alivio para la recuperación económica y social». El consejero calificó de «logro colectivo» que las dos provincias extremeñas puedan seguir avanzando en el plan de desescalada, un cambio que habrá que desarrollar con «tremenda prudencia, responsabilidad, compromiso, esfuerzo, educación a la ciudadanía y control de las actividades que se van realizando».

Sobre este asunto, Vergeles recordó que la Comunidad Valenciana, por ejemplo, ha decidido aplazar su pase de la fase 1 a la 2 del plan, una decisión que a su juicio supone un «ejemplo de prudencia». «Somos los más interesados en que la desescalada sea un éxito», resaltó el consejero, que insistió en que el principal objetivo para el Gobierno regional es que «la desescalada sea adecuada y un éxito».

Franjas horarias

Cabe señalar que en la fase 2 del plan de desescalada las franjas horarias de salida se suprimen, no obstante, hay que mantener las medidas para las personas vulnerables y mayores de 70 años con unas franjas y espacios específicos que la comunidad autónoma tendrá que determinar. Vergeles se mostró partidario de fijar una franja para ello, preferiblemente por la mañana, aunque reconoce que esto «es algo artificial» dado que estas personas, si lo desean, pueden acudir a cualquier establecimiento hostelero o lugar de ocio a cualquier hora.

En este sentido, el consejero apuntó que con la ampliación de actividades que se van a poder llevar a cabo desde mañana, es «difícil» que no coincidan grupos de diferentes edades, pero se intentará que, al menos, que las personas mayores de 70 años no coincidan con los niños.