Alumnos de 4º de Educación Secundaria de 36 centros educativos, tanto públicos como concertados, conocerán el testimonio de víctimas del terrorismo para que sepan lo sucedido en España y para esto sirva «como elemento de prevención de futuras violencias», según expuso ayer la directora general de Apoyo a Víctimas del Terrorismo del Ministerio del Interior, Sonia Ramos, en el Instituto Emérita Augusta de Mérida, donde arrancó el proyecto educativo en el que también colaboran la Secretaría General de Educación y la Dirección General de Emergencias y Protección Civil de la Junta.

La primera charla corrió a cargo del guardia civil extremeño retirado Antonio Guerra, que perdió un brazo y padeció importantes secuelas en un atentado en el cuartel de Algorta (Bilbao) en 1982.

En declaraciones a los medios, Sonia Ramos explicó que las jornadas pretenden «dar a conocer cuál ha sido la historia del terrorismo en España, de los distintos terrorismos que han actuado y actúan, pero desde el punto de visto de las víctimas». Se trata, según dijo, de hacerles entender que «es posible hacer frente a las diferencias a través del diálogo, del respeto entre personas que son distintas y tienen ideologías y creencias de todo tipo, religiosas, culturales, políticas, sin que sea necesario el uso de la violencia».

En este proyecto darán su testimonio a los alumnos de distintas comunidades autónomas entre 30 y 50 víctimas -13 de ellas en Extremadura- de terrorismo de distinta índole, sobre todo de la banda terrorista ETA, pero también del Grapo o de grupos yihadistas.

La iniciativa, que comenzó en el País Vasco, se lleva a cabo ahora también en Madrid, La Rioja y Castilla y León.

El secretario general de Educación, Rafael Rodríguez de la Cruz, valoró el interés de la iniciativa para que los alumnos «conozcan el fenómeno del terrorismo en España a partir de una unidad didáctica que previamente han estudiando en clase» y que complementan con el testimonio de las víctimas.