El voto de los emigrantes en las elecciones autonómicas se decantó con claridad por el candidato socialista Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que obtuvo 2.203 sufragios, lo que supone el 61,3% de los votos emitidos, es decir, diez puntos más que lo que marca el resultado global. Mientras, el popular Carlos Floriano quedaba con 985 votos, el 27,4% (catorce puntos menos que en el general). Por su parte, IU obtuvo 200 sufragios, es decir, el 5,5%, algo por debajo de lo conseguido entre los residentes en la región.
De cualquier forma, lo más distintivo del voto emitido por los denominados residentes ausentes en el extranjero fue el desinterés que mostraron hacia la cita electoral, ya que apenas ejerció su derecho al voto el 18% de los 20.000 censados.
Por provincias, en la de Cáceres votaron 2.000 de los 11.000 emigrantes extremeños con derecho a hacerlo, mientras que en Badajoz fueron algo más de 1.500 de los 9.000 censados los que votaron.
SIN CAMBIOS EN LAS CIUDADES
En cuanto al escrutinio definitivo realizado ayer por las juntas electorales de zona sobre los sufragios en las elecciones municipales, lo más destacable es que no hizo variar el reparto de concejales en las principales ciudades de la región. Así, aunque se produjeron leves variaciones en cuanto al número de votos, no fueron suficientes para cambiar el panorama dibujado por los resultados provisionales conocidos en la madrugada del lunes.
En Cáceres, José María Saponi afianzó aún más su mayoría absoluta, al aceptar la junta de zona la petición del PP para que diese por buenos 216 votos que se dieron por nulos porque el tamaño de las papeletas era menor que el oficial. Los populares argumentaron que la Junta Electoral Central había aceptado este formato. Mientras, IU sumó dos sufragios más.
Por otro lado, en Mérida la revisión de actas sirvió para que Pedro Acedo incrementase la exigua ventaja que le ha dado la mayoría absoluta en el ayuntamiento, y que ahora queda en 109 votos más que el PSOE. La junta desestimó la impugnación socialista sobre 120 papeletas del PP que eran de otro tamaño y color. En cuanto a los 214 votos nulos, no se aceptó ninguno.
Respecto a Badajoz, tampoco se produjeron apenas cambios. El PP mantuvo sus 37.092 votos, mientras el PSOE ganaba uno e IU sumaba 22.
Finalmente, en Jaraíz de la Vera, donde peligraba la mayoría absoluta del socialista Nicasio Bote, el recuento definitivo no otorgó a IU el ansiado voto que le permitiese acceder a la nueva corporación municipal.
De este modo, el PSOE podrá mantener su ventaja y gobernar en solitario con siete concejales frente a los cinco del PP y uno de la Plataforma Socialista Independiente de Extremadura, formada por los militantes expulsados del PSOE.
