"Europa no se ha hecho realidad todavía, su futuro entre los demás pueblos del mundo está por definir". La frase es de hace tan solo dos años, de la declaración formulada en junio del 2006 por los miembros de la Academia Europea de Yuste. Y quizás resulte algo distante en el tiempo, pero su vigencia, según lo debatido ayer en Cáceres, puede mantenerse actualmente intacta.

Los Reyes de España viajan hoy a Yuste precisamente para reconocer la labor de una persona que, según el jurado del Premio Carlos V, ha luchado para que esas distancias entre los ciudadanos del viejo continente se acorten hasta desaparecer. Por ello será hoy galardonada la política y jurista francesa Simone Veil, cuyo nombre ya aparece en los libros de historia como la primera mujer en presidir el Parlamento Europeo. A partir de hoy también lo hará por ser la primera fémina que recibe este premio de la Academia de Yuste.

Y eso es lo que quieren los más de 30 intelectuales y políticos de toda Europa que ayer se dieron cita en el Palacio de la Diputación de Cáceres para debatir y firmar el nuevo Tratado de Yuste, un documento que plantea la necesidad de crear un currículo común de conocimientos sobre los valores culturales y cívicos de la UE para enseñárselo a las nuevas generaciones en los últimos cursos de Educación Secundaria de todos los estados miembros.

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"Consideramos que un proyecto como éste, que pretende crear unas directrices comunes para todos los alumnos de secundaria de la Unión, es una manera eficaz de mostrar nuestro firme compromiso con el proceso de construcción europea a través de la educación y de la cultura, precisamente en los momentos actuales de incertidumbre por los que está pasando dicho proceso tras el reciente referéndum de la República de Irlanda", concluyeron los asistentes, entre los que se encontraban el catedrático holandés de Sociología Abram de Swaan, la exministra alemana de Juventud Ursula Lehr, el lingüista búlgaro Tzvetan Todorov, el escritor extremeño Jesús Sánchez Adalid o la presidenta de la Academia Portuguesa de Historia, Manuela Mondoça. Por ello plantean la creación de "una docena de temas que abarquen los aspectos principales de la civilización Europea durante los últimos 500 años".

Así, proponen enseñar a todos los estudiantes del continente aspectos como la evolución de la democracia representativa y el Estado de Derecho, el mercado y la sociedad civil, u otros como el desarrollo de la pintura o la literatura, todo ello de forma interactiva: "Los alumnos, profesores y escuelas pueden aceptar el desafío e investigar los antecedentes locales de estos temas". Y aprovechando los recursos disponibles, creando un sitio web con la información de estos temas traducida en todos los idiomas y con material audiovisual "atractivo y estimulante".

"Tenemos que adoptar un enfoque distinto para divulgar la idea de civilización europea entre los jóvenes", sentencia un documento al que no pudo contribuir el premio Nobel de Literatura José Saramago por, ausente por enfermedad.