El secretario general de PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, aprovechó ayer su visita a Cáceres para anunciar que no sólo aprobará una ley integral contra la violencia doméstica sino que será el primer proyecto legislativo que enviará al Parlamento si resulta elegido presidente del Gobierno tras las elecciones generales del 2004. "Habrá ley integral y será la primera que remitiré al Parlamento", dijo ayer ante 6.000 enfervorecidos simpatizantes que abarrotaban el pabellón multiusos de la capital cacereña.

Los socialistas eligieron Extremadura para celebrar el acto principal con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora. Además del líder del PSOE, participaron también el secretario general del partido en Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra; la candidata a la alcaldía de Cáceres, Carmen Heras; y la responsable de Políticas de Igualdad, Micaela Navarro. Una vez más se puso de manifiesto la gran capacidad de convocatoria del PSOE, cuyos militantes se desplazaron a Cáceres desde todos los rincones de Extremadura.

Si gobierna, la pretensión del PSOE es elaborar una ley que aborde desde todos los frentes el problema de la violencia doméstica. A pesar de ser un acto con motivo del Día Internacional de la Mujer Trabajadora, el discurso de Zapatero estuvo plagado de alusiones a la posición del Gobierno en el conflicto de Irak. Desde el PSOE se ha insistido en la necesidad de elaborar una ley específica para atajar el problema de la violencia doméstica y no limitarse a la aprobación de planes anuales.

Zapatero criticó que en la actualidad las mujeres "nunca" ocupen puestos de responsabilidad en las grandes empresas y los bancos del país, y dijo que a partir de un determinado nivel "sólo hay azafatas". "Para ser buen socialista, hay que ser feminista", añadió. El líder socialista advirtió de que esta situación se puede cambiar con la aplicación de políticas que fomenten la igualdad entre los sexos. Asimismo, dijo estar "seguro" de que Cáceres tendrá "alcaldesa" y afirmó que Heras es "todo fuerza y todo ganas".

El responsable de los socialistas y candidato a la presidencia del Gobierno instó a sus "compañeras y compañeros" a que den "más apoyo y cariño que nunca" Rodríguez Ibarra, puesto que le necesita para acometer todos los cambios que desea realizar en España si logra gobernar. Zapatero dirigió una sonrisa cómplice a "Juan Carlos" en ese momento, lo que desató los aplausos.

Por su parte, Micaela Navarro calificó de "imprescindible" que la mujer esté en política "para acabar con la desigualdad hombre-mujer". Carmen Heras centró su intervención en atacar al equipo de gobierno local, a cuyos miembros llamó "mediocres".