Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura ha presentado ya su solicitud al Ministerio de Hacienda para que incluya a todas las comarcas productoras de cereza del norte de la región (Jerte, Vera, Hurdes, Gata e Ibores) en la reducción de módulos del IRPF al no incluirse estas zonas en la Orden publicada en el BOE el pasado 30 de abril.

Esta Orden contempla una reducción de fiscalidad para el cultivo de cereza, pasando del índice de 0,37 al 0,07, tal y como solicitó Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, pero sólo para diversas localidades de la provincia de Badajoz, además de Madrigalejo y Miajadas, sin que se incluyan las zonas productoras de cereza por excelencia de Extremadura.

El objetivo es equilibrar la fiscalidad a la realidad de las producciones, más aún cuando el pasado año las pérdidas de producción en este cultivo en la Agrupación de Cooperativas del Valle del Jerte, cooperativa asociada a Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura, ha supuesto una reducción del 54,25% de la producción real con la producción potencial de los últimos 5 años.

PROPUESTA / Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura presentó el pasado mes de enero su propuesta de reducción de estos módulos ante la preocupante situación de pérdidas de producción sufrida el año pasado por las adversidades climatológicas para cultivos como los cereales, fruta y cereza, además de para la apicultura, y que ha sido recogida prácticamente en su totalidad en la citada Orden.

La federación extremeña de cooperativas, que aglutina al movimiento cooperativo agroalimentario de la región, ha mostrado así su satisfacción por conseguir transmitir al Gobierno, a través de la Junta de Extremadura, las circunstancias excepcionales que atravesaron numerosos sectores agroganaderos, generando un incremento de costes que afectó, junto a precios a la baja, a la rentabilidad de las explotaciones.

Así, Cooperativas Agro-alimentarias Extremadura ha manifestado su satisfacción por que el Ministerio de Hacienda haya tenido en cuenta su petición y reduzca el índice en los módulos del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas para los agricultores de cereales y frutas en las zonas más productoras de Extremadura, además de para los apicultores de la región. Estas reducciones suponen en la práctica una disminución proporcional de la base imponible derivada de los rendimientos de la actividad agraria y, por tanto, del resultado de la declaración del IRPF para los agricultores y ganaderos extremeños.