La Feria del Queso de Trujillo, que se celebra del 1 al 4 de mayo, inicia este año, en su XVIII edición, una nueva etapa gracias a la participación por primera vez de diferentes países de la Unión Europea (UE). El presidente del Comité Ejecutivo de la Feria, Eloy Redondo, quien presentó ayer en Madrid este evento, anunció que este año se podrán degustar, además de las especialidades españolas, entre ellas las canarias, que participan también por primera vez, las de Italia, Francia, Bélgica, Dinamarca, Suiza, Alemania y Holanda.

Redondo apuntó que el reto de la ejecutiva ferial es conseguir extender la participación internacional y aseguró que actualmente la Feria de Trujillo, que este año contará con 114 expositores, 22 más que en el año anterior, es la principal feria monográfica del queso en España.

Indicó que en esta edición también se cuenta con la novedad de que un día antes se celebrará en este municipio el encuentro anual de la Liga de Ciudades Europeas Unidas por el Queso, institución del Comité Plenario de los Quesos de Europa, que aúna a 18 ciudades europeas de interés turístico y quesero.

CATA CONCURSO DE QUESOS

Por este motivo, un día antes de la inauguración de la feria, el 30 de abril, se desarrollará una jornada en la que se abordarán aspectos como la calidad de la leche y la influencia racial, el manejo de las explotaciones de ovino y caprino y el vínculo entre el queso y la gastronomía. Se realizará un encuentro entre las denominaciones de origen de queso españolas y comunitarias para poner en común la situación de cada una.

Redondo destacó que la estrella de esta feria, que se complementará con diversos actos culturales, será la cata-concurso que se celebrará el sábado, 3 de mayo, en las modalidades de queso de cabra o de oveja de pasta dura o blanda, que este año también tendrá un tinte internacional.

Antonio Sánchez, de Caja Duero, institución patrocinadora del evento, aseguró que su entidad seguirá apoyando esta Feria por su gran arraigo entre los visitantes, que anualmente rondan los 80.000, e invitó a los madrileños a visitar Trujillo, además de por sus quesos, por su gran interés histórico.