Fernando Alonso señaló en la web de Ferrari que el sexto puesto en el Gran Premio de Mónaco, tras una espectacular remontada, le dejó un sabor agridulce, pero agregó que ahora es el momento de "arremangarse" para seguir mejorando el rendimiento del coche.

Al recordar la carrera del domingo, en la que remontó 16 puestos para acabar sexto, Alonso señaló: "Ha sido un Gran Premio agridulce para mí. Está claro que el saldo es negativo en cuanto a puntos se refiere, sobre todo porque tenía todas las posibilidades de luchar por ganar". Sin embargo, al final sintió "una gran satisfacción". "Sabíamos que si queríamos entrar en los puntos, todo tenía que funcionar perfecto: el coche, la estrategia, los neumáticos, los adelantamientos.... Y así fue".

"Y al final pasó el episodio con Michael Schumacher. Desde el muro me informaron de que con la carrera neutralizada en la última vuelta no se puede adelantar, y por eso me quedé tranquilo. Luego los comisarios pusieron las cosas en su sitio".

"Ahora hay que arremangarse para impulsar aún más el desarrollo del coche: hay que mejorar en cuanto a rendimiento, pero estamos en plena lucha y no queremos dejar ninguna piedra sin mover para llegar a alcanzar nuestras metas", concluye.