El Gobierno socialista reactivará en los próximos meses la propuesta de reforma de la supervisión de los mercados financieros. Según explicó recientemente el vicepresidente económico, Pedro Solbes, el nuevo modelo se construirá sobre dos reguladores: el Banco de España y una Comisión Nacional de Servicios Financieros, que asumirá y ampliará las funciones de la actual Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El Banco de España se encargará de vigilar la solvencia de bancos, cajas y establecimientos financieros, como hasta ahora, y, además, de aseguradoras y de empresas de servicios financieros.