Queremos ser en el mercado de particulares como la mejor caja local, que siempre ha llevado una política de proximidad, de conocimiento del cliente. Queremos que cada uno de ellos se sienta como el más importante del banco". Enrique García Candelas tiene claro que éste es el principal objetivo del Banco Santander dentro del segmento minorista.

--¿Qué objetivos se marca el Banco Santander en la región?

--Extremadura es uno de los objetivos prioritarios para nuestro banco, sobre todo a raíz de la decisión que tomamos en julio pasado de que se convirtiese en una territorial independiente. Esto está provocando una mayor aproximación a nuestros clientes. Además, el plan estratégico que tenemos implantado a nivel nacional, el de Queremos ser tu banco , aquí está teniendo un éxito tremendo, lo que nos está permitiendo obtener tasas de captación, retención y vinculación de clientes superiores a la media nacional. Por lo tanto, somos optimistas. Creemos que el nuevo equipo gestor está logrando unos resultados que nos harán crecer en los próximos años más rápidamente que la media nacional y posiblemente ganándole cuota al sistema financiero local.

--¿Cree entonces que éste puede ser un buen momento para arañar cuota a las cajas en el mercado de particulares?

--Estamos convencidos de ello. Nosotros ya somos líderes en estos momentos a nivel nacional en banca privada, banca institucional y banca de empresas. Nuestro plan estratégico pretende fundamentalmente arañar cuota en el mercado de particulares, que ha sido un feudo histórico de las cajas de ahorros. Desde el 2006 no hemos parado de ganar cuota tanto a nivel nacional como en Extremadura.

--Y en este contexto se enmarca la hipoteca de euríbor más 0,25 que acaban de lanzar al mercado...

--Forma parte de él, es una oferta más de valor añadido, pero fundamentalmente nuestro proyecto está basado en el no cobro de comisiones por servicio a nuestros clientes vinculados. Lo que peor le sienta a un particular es que su entidad financiera le cobre por todos los conceptos, especialmente por los servicios que entiende que deben ser gratuitos. Tomar la decisión de eximir de estas comisiones ha supuesto para nosotros un reforzamiento de nuestra imagen en el mercado de particulares y nos ha dado la posibilidad de aumentar la tasa de captación por encima de lo que sucede en el resto del sistema.

--¿Cómo está afrontando el Banco Santander la ralentización económica, en especial la crisis de sector inmobiliario?

--La ralentización económica es algo natural después de catorce años de crecimiento ininterrumpido con tasas históricas para este país. Lo cierto es que el Santander viene desde hace tiempo tomando medidas para afrontar esta situación, que no nos preocupa. Creemos que es sano que haya también una depuración y que se estabilicen algunos sectores. En cuanto al sector inmobiliario, ha tirado fuertemente de la economía del país, con una aportación al PIB nacional de en torno al 12 o el 13%. Después de tanto crecimiento y de una oferta tan agresiva, es normal que se contenga la demanda y que la oferta esté sufriendo un poco. Pero esto es algo cíclico y lo que habrá que hacer es gestionar los tiempos de forma distinta.

--¿Y esta gestión de tiempos incluye también cerrar el grifo de los créditos a las promotoras y constructoras?

--Yo diría que no. Sinceramente creo que a veces a las entidades financieras, cuando hay momentos de dificultad, se nos echa la culpa de que podemos estar en una situación de cierre de financiación. Pero no es cierto, nosotros lo que sí estamos haciendo es adecuar nuestro modelo de gestión del riesgo a los momentos actuales. Y lo que se puede garantizar es que atendemos todas las propuestas solventes. Y es lógico: el propio Banco de España nos recomienda llevar a cabo esta política de riesgos. Es posible que en otros tiempos haya habido más facilidades para propuestas tal vez no tan solventes, y ahora lo que esté sucediendo es que estemos siendo un poco más exigentes, pero de ningún modo se han dado instrucciones para que nuestras oficinas pierdan actividad o agresividad en la concesión de créditos.

--¿Goza el sistema financiero español de buena salud?

--Creo que ha habido una política extraordinariamente eficiente por parte del regulador, el Banco de España. El sistema financiero español es posiblemente uno de los más solventes y eficientes del mundo, con lo que estamos alejados de las problemáticas que puedan producirse en otros mercados. Esto nos da una tranquilidad extraordinaria para afrontar cualquier situación de cambio económico.

--¿Cómo ve el panorama económico en Extremadura?

--La región está creciendo por encima de la media nacional. Y lo está haciendo afrontando una gestión en muchos frentes, en muchos sectores, y esto es algo muy importante. Desde luego, auguro a esta comunidad un progreso importante en los próximos años.

--¿Y qué papel se propone desarrollar el Banco Santander en este crecimiento?

--A pesar de que nuestro domicilio social está en Santander, hacemos una gestión local, con total autonomía e independencia, y queremos competir con las entidades locales. Nos sentimos extremeños. ¿Por qué?, porque si llevamos desde hace 90 años en esta comunidad y nuestra vocación es la de permanencia en el tiempo y de compromiso con la región, evidentemente nos diferenciamos muy poquito de otras entidades que son puramente extremeñas. Por tanto, nuestro papel va a ser determinante como primera entidad nacional y como uno de los grandes bancos del mundo. Queremos aportar en todas las comunidades, pero especialmente en aquellas que entendemos que necesitan un progreso mayor y un apoyo de entidades financieras de primera línea.

--Donde de momento parece que no están entrando es en la guerra de los depósitos.

--La verdad es que la banca es muy dinámica y agresiva y ahora ha visto la ocasión, con los tipos de interés actuales, de buscar aquí una oportunidad de negocio. Nosotros no hemos entrado porque entendemos que este tipo de batallas en estos momentos no son adecuadas. Sí hemos entrado, sin embargo, en una guerra en la que pocos nos han seguido, que es la de ofrecer créditos hipotecarios baratos en un momento tan complicado como éste. Hoy el Santander está dispuesto a conceder 50.000 créditos hipotecarios a un promedio de entre 100.000 y 150.000 euros, al 0,25. A ver quién es capaz de hacer una oferta tan agresiva como ésta. Nosotros, en los momentos difíciles, preferimos ir a contracorriente. Tal vez pagar el pasivo resulta fácil, pero ofrecer dinero barato cuando los clientes ven ciertas incertidumbres creo que dice mucho a favor de nuestra entidad.