Doce más una ediciones cumplieron el pasado jueves los premios Empresario Extremeño del Año. La entrega de galardones, que tuvo lugar en el Hotel Cáceres Golf, volvió a ser una vez más un excelente termómetro de la buena salud de la que goza actualmente el tejido empresarial extremeño.

El máximo reconocimiento que existe dentro del mundo de los negocios en Extremadura fue a parar en esta ocasión a Manuel López Pecero, empresario de Fuente del Maestre, impulsor, junto con su mujer Isabel Bolaños, del grupo empresarial López Bolaños. Este grupo centra su actividad en la producción y comercialización de cristales y persianas y comprende las empresas Cristales y Persianas López, Alumasa y Expalum.

Estas tres empresas le permiten tener cubierto la mayor parte del ciclo de producción, un ciclo que quiere completar en tres o cuatro años con la puesta en marcha de una fábrica de laminado en frío.

Pero Manuel López no fue el único galardonado de la velada organizada por EL PERIODICO EXTREMADURA: Octavio Narros, presidente del consejo de administración de Urvicasa, recibió el premio a la Trayectoria Empresarial. No en vano, a sus 68 años este empresario puede presumir de conocer todas las actividades del mundo de la construcción. Ha sido aparejador, jefe de obra, delegado de zona, director gerente y en la actualidad es el máximo responsable de una promotora que se mantiene en los tres primeros puestos de la clasificación regional en construcción de viviendas.

El galardón al joven emprendedor fue para Ignacio García Gamero (1971), gerente de Promociones Medioambientales Villafranquesa. Este ingeniero superior industrial ha puesto en marcha una empresa especializada en el uso de biomasa residual como combustible.

En cuanto a la promoción de Extremadura, el jurado quiso reconocer la importante labor que ha realizado Pizarras Villar del Rey desde que hace ya cinco lustros comenzase su fructífera trayectoria. El 90% de las 30.000 toneladas de elaborados que cada año se producen en su explotación se destinan a la exportación. El galardón lo recogió Julián Cuéllar Reynolds.

Como mejor empresa agroalimentaria del año se designó a Aceitunera del Norte de Cáceres (Acenorca). Cuenta actualmente con 4.000 asociados que suman en conjunto dos millones de olivos. Da trabajo a 140 personas y factura 20 millones de euros. Además, el año pasado inauguró sus nuevas instalaciones en Montehermoso, en las que invirtió 15 millones de euros.

El premio a la Innovación fue a parar a otra empresa agroalimentaria: Herlusa, la firma elaboradora de los productos El Arroyano, que se ha caracterizado siempre por sus constantes trabajos de investigación, labor que ha logrado certificar bajo la norma UNE EN 166.002-2006. Es la primera empresa extremeña y la número 91 en España en lograr esta acreditación.

MEDIO AMBIENTE Sierra Clara Golf, la única empresa del país que está certificada para el diseño de campos de golf respetuosos con el medio ambiente, fue reconocida con el premio a la conservación del Medio Ambiente. Al frente de esta original aventura empresarial se encuentra Fernando Menaya Nieto-Aliseda.

Por último, Grupo Comercial Extremeña (Comex) recibió el galardón a la Calidad. Aglutina las empresas Apósitos Extremeños, Comercial Extremeña Hospitalaria y Comercial Extremeña de Esterilización. Ubicada en Lobón, es una de las pocas firmas del sector en certificarse en calidad por la norma ISO 9001-2000.