Meghan Markle gana adeptos en su lucha contra la prensa sensacionalista británica. Después de los apoyos públicos de personalidades como Hillary Clinton, Kim Kardashian y Louis Sarkozy, el hijo de Sarkosy, ahora 72 parlamentarias inglesas han firmado una carta abierta mostrando su solidaridad y en contra de los medios que dan una versión "desagradable y engañosa" de algunas informaciones. A principios de octubre, los duques de Sussex emitieron un extenso comunicado en el que anunciaron que emprenderían acciones legales contra algunos medios por lo que consideran "una campaña despiadada". La gota que colmó el vaso fue la publicación de una carta privada de la mujer del príncipe Enrique a su padre.
La carta, encabezada por la diputada laboralista Holly Lynch y a la que se suman políticas de todo el espectro, alegan que "como mujeres parlamentarias de todas las tendencias políticas se oponen a las informaciones publicadas en periódicos nacionales del Reino Unido por ser "a menudo desagradables y engañosas". "En ocasiones, las historias y los titulares han representado una invasión de su privacidad y han tratado de emitir opiniones sobre su persona, sin ninguna buena razón", continúa su carta, que insiste además en lo preocupante que resulta " el trasfondo colonial obsoleto en algunas de esas historias".
"Esperamos que los medios de comunicación nacionales tengan la integridad de saber cuándo una historia es de interés nacional y cuándo se trata de derribar a una mujer sin razón aparente. Utilizaremos los medios a nuestra disposición para garantizar que la prensa acepte su derecho a la privacidad y muestre respeto y veracidad", concluye el comunicado.
