Fue uno de los rostros más conocidos y atractivos de la televisión de los años 90. Con 20 años debutaba en Pasa la vida apadrinado por María Teresa Campos. Gracias a un agraciado físico y a un simpático desparpajo, Alonso Caparrós se convirtió rápidamente en uno de los presentadores más populares y demandados de la época.

Durante cuatro años (1998-2001) presenta el concurso 'Furor' de Antena 3 y 'Menudas estrellas, en lo que sería uno de los momentos más álgidos de su carrera profesional, pero también significó el inicio de un torbellino de fiestas y drogas que lo precipitaron hacia un declive lento pero constante de adiciones y problemas familiares y profesionales, que ahora 20 años después y coincidiendo con su 50 aniversario, el presentador ha reconocido públicamente.

De joven estaba un poco loco y presentar Furor me dio muchos problemas, le perdí el gusto a querer vivir, ha asegurado Caparrós recientemente.

Pero como el protagonista de una película estadounidense de constricción y redención, Andrés Caparros ha conseguido rehacer su carrera profesional, tras fichar en el 2017 como colaborador de Sálvame, y en su vida personal, después de casarse en el 2015 con Angélica Delgado. Ella marca un punto de inflexión gordo en mi vida. Desde la comprensión y la calma, me dijo que de ninguna manera lo iba a aceptar en su vida. En ese momento, me dije: 'Se acabó', ha confesado Alonso.

FELICES 50

Ahora, con 50 años que cumple el 24 de noviembre, Caparrós, después de sincerarse el pasado lunes en el programa Sálvame Deluxe' con Jorge Javier Vázquez, ha demostrado estar a la altura de un programa que dura cinco horas en directo recuperando ese desparpajo que le hizo famoso y demostrando una profesionalidad intachable.

Con el tiempo también ha conseguido tender puentes con toda su familia, en especial con su padre Andrés Caparros, con el que tuvo varios enfrentamientos públicos, pero con el que ha demostrado tener una relación magnífica en estos momentos.

Un colaborador de televisión que ha resurgido de los infiernos para estar ahora en uno de los mejores momentos profesionales de su vida y lo mejor de todo, habiendo aprendiendo lo que es tocar el cielo y el infierno en un abrir y cerrar de ojos. Hoy, Alonso Caparrós cumple 50 años por todo lo alto.