Con esta expareja nunca se sabe. Han dado muestras de querer mejorar sus relaciones por el bien de sus hijos y de todo lo contrario. Se ha asegurado que él cumple el régimen de visitas establecidas y de todo lo contrario. Ambiguos siempre en sus declaraciones, han utilizado a los abogados para mantener un embrollo legal que dura ya cuatro años.

En un nuevo capítulo, la actriz Angelina Jolie ha presentado una moción en el tribunal de Los Ángeles para que aparten al juez que lleva su caso. ¿La razón? No haber informado acerca de su relación profesional con una de las abogados de su ex, Brad Pitt. Jolie asegura que John W. Ouderkirk, el juez en cuestión, debería ser apartado del proceso de divorcio que la actriz presentó en el verano del 2016 porque no fue claro e informó tarde sobre otros casos en los que había trabajado con Anne C. Kiley, una de las letradas que representa a Brad Pitt. En términos legales, según el informe presentado, "Ouderkirk no dio a conocer los casos que demuestran la relación de cliente actual, recurrente y en curso entre él y la consejera del demandado".

La protagonista de 'Maléfica' insiste en que la abogada de Brad Pitt había velado por los intereses financieros del juez Ouderkirk "para que su nombramiento -y la posibilidad de que afecte a su remuneración- se amplíe en un caso muy público". Esto se explica porque, como muchas parejas famosas en Estados Unidos, contrataron a un juez privado para evitar que sus datos personales y económicos salieran a la luz, aunque algunos movimientos legales siguen las medidas habituales y por ello pueden hacerse públicos.

Sin embargo, que el juez no haya sido contratado por el Tribunal no quiere decir que no deba seguir sus normas, lo que debería haber dado a conocer su posible sesgo. "No importa si el Juez tiene o no preferencia pero bajo la ley de California está obligado a salir del caso al crear 'duda razonable' de su habilidad para mantenerse imparcial", continúa la moción que ha presentado Angelina a través de sus representantes.

Después de tres años de batalla legal, en abril de 2019 Angelina Jolie y Brad Pitt oficializaron su divorcio y la actriz se cambió el nombre para dejar de utilizar el de su exmarido. El divorcio se produjo sin haber dejado claras las cuestiones financieras y la custodia de los niños. En el 2018, la actriz reclamó que el que fuera su esposo durante dos años no pagaba suficiente manutención a sus seis hijos. En todo este proceso, los abogados de Pitt han asegurado que la acciones de Jolie no buscaban otra cosa que manipular a los medios de comunicación en su favor tras la ruptura.

La actriz, que estuvo rodando unos días en Canarias la que será una nueva producción para Disney, continua involucrada en causas benéficas como embajadora de ACNUR, la agencia de la ONU que vela por los refugiados. Más recientemente, la intéprete de 'Inocencia interrumpida' hizo un llamamiento contra el racismo y la discriminación social y realizó una importante donación para luchar por la igualdad racial y la justicia social tras el asesinato de George Floyd.