"Que esta revolución no se pare". Este fue el grito de guerra que entonaron ayer los cocineros españoles incluidos en el top tende la prestigiosa lista S. Pellegrino y editada por la revista Restaurant, que incluye a los mejores 50 restaurantes del mundo. Por cuarto año consecutivo, El Bulli, de Ferran Adrià, sigue siendo el número uno. Mientras, el restaurante vasco Mugaritz, de Andoni Luis Aduriz, ocupa el cuatro, seguido de otro catalán, El Celler de Can Roca, de los hermanos Roca. El octavo puesto es para otro local de Euskadi, Arzak, de Juan Mari Arzak. "Todas las listas son injustas. Hay gente que debería estar", reflexionó Adrià, que, sin embargo, se mostró eufórico con lo que él considera la gran victoria de los cocineros españoles.