Salvajes, desequilibradas y dañinas resultan las dietas extremas a las que se someten muchas celebrities para lucir un cuerpo 10. Beyoncé, que abandera el club de las fanáticas de la báscula, ha conseguido esculpir (con constante sacrificio) unas de las curvas más elogiadas de los escenarios.

Ahora, la cantante, que el próximo 4 de septiembre cumplirá 38 años, ha publicado un vídeo en YouTube, donde describe la insana dieta que se vio obligada a seguir para lucir una escultural figura en el Festival de música de Coachella.

La cinta titulada 22 Days Nutrition (22 días de nutrición ) hace referencia a la dieta homónima, que impulsó el entrenador personal de la estrella, Marco Borges, que consiste en seguir una alimentación vegana durante 22 días, con la que asegura perder un mínimo de 10 kilos.

Según Borges, el régimen se basa en ingerir únicamente verduras, frutas, hortalizas y cereales. "Un detox natural de 22 días" del que curiosamente se ha hecho eco incluso el New York Times.

EPISODIOS DE ANSIEDAD

El vídeo comienza con la compositora y bailarina subiéndose a la báscula antes de su primer ensayo para el concierto, cuando su peso era de 79 kilos. Ocho meses antes, después de dar a luz a sus gemelos, Rumi y Sir Carter, que nacieron en junio del 2017, la diva llegó a pesar 98 kilos, y que su bajada de peso (que no cita en ningún momento) la logró siguiendo a raja tabla este régimen no solo 22 días, sino 44.

Además de comer solo vegetales, la artista se encontraba inmersa en su nuevo show con complejas coreografías, fatigantes ensayos diarios, que compaginaba con su rol de madre de sus tres pequeños. Un vertiginoso ritmo, que, según cuenta en el vídeo, terminó pasándole factura llegando a sufrir episodios de ansiedad, mareos y temblores musculares.

"LECCIÓN MUY VALIOSA"

Ahora, si algo tiene claro Beyoncé, es que jamás volverá a seguir este tipo de dietas milagro: Para poder cumplir mi objetivo, me limito a no comer pan, ni carbohidratos, ni azúcar, ni lácteos, ni carne, ni pescado, ni alcohol... Y sí, paso hambre! Ya no soy como antes, cuando ensayaba durante 15 horas seguidas. Ahora tengo hijos y tengo marido. Debo cuidar mi cuerpo. Definitivamente me empujé más lejos de lo que realmente podía con la dieta. Aprendí una lección muy valiosa: nunca, nunca me empujaré tan lejos otra vez, confiesa la intérprete, que ha reconocido en numerosas ocasiones: "No soy delgada por naturaleza".