El presidente de EEUU, Barack Obama, se presentó ayer sin avisar en un centro comunal en el noreste de Washington para leer pasajes del libro navideño El expreso polar a 27 niños. Tras la lectura, el político les preguntó qué regalos habían pedido: móviles y videojuegos. "¿Por qué nadie quiere una bici?", lamentó.