Brad Pitt le echó un hueco a su apretada agenda para visitar por expreso deseo el museo Chillida Leku de Hernani, en compañía de la viuda del escultor, Pilar Belzunece y varias de sus nietas (foto). El actor, gran aficionado a la arquitectura, demostró una vez más que los flases de Hollywood no están reñidos con la cultura.