Camilla Parker Bowles, esposa del príncipe Carlos de Inglaterra, se convirtió hoy en la nueva inquilina del famoso museo de cera londinense Madame Tussauds. Según informaron fuentes de la popular atracción turística, la figura de la duquesa de Cornualles se ha instalado provisionalmente un poco alejada de la de su esposo, heredero a la Corona y príncipe de Gales, si bien ambas esculturas se exhibirán juntas en el futuro.

La estatua de Camilla se encuentra en la llamada "zona real", donde también se alzan las reproducciones de otros miembros de la realeza, como la reina Isabel II y los dos hijos de Carlos, los príncipes Guillermo y Enrique. No obstante, la duquesa no ha podido librarse de su antigua adversaria, la difunta princesa Diana de Gales, quien le acusó del fracaso de su matrimonio con el heredero al trono.

Camilla luce un traje de falda y chaqueta floreado que vistió en las famosas carreras de caballos de Ascot en 2005, así como un par de zapatos color crema y un bolso donados por la propia duquesa. La esposa del primogénito de Isabel II posó en Clarence House, residencia oficial del príncipe de Gales en Londres, para el artista Stephen Mansfield, que tardó cuatro meses y medio en completar la obra. Según Mansfield, Camilla encontró "divertido" su proceso de trabajo, que incluyó la toma de fotografías desde diversos ángulos.

La nueva inquilina se instaló en el museo más de dos años después de que Camilla se casara con el príncipe Carlos, con quien ha mantenido, empero, una relación sentimental intermitente durante más de tres décadas. "Cuando el príncipe de Gales se casó con la duquesa de Cornualles, no había mucho interés del público en tenerla aquí", aunque "en los últimos doce meses se ha producido una oleada de apoyo general", dijo Ben Lovett, portavoz del Madame Tussauds.

La estatua de Carlos, un apasionado defensor del medio ambiente, fue reemplazada el año pasado por otra figura hecha con materiales naturales y reciclados, al igual que ha sido realizada ahora la de su esposa.