"Mi gran lucha ha sido siempre la determinación de ser libre, independientemente de cómo haya nacido y las circunstancias a las que me haya enfrentando", afirmó Cayetano Martínez de Irujo en la presentación de sus memorias, tituladas 'De Cayetana a Cayetano', donde pasó de la risa al llanto.

Cayetano Martínez de Irujo Fitz-James Stuart (Madrid, 1963), hijo de Cayetana Fitz-James Stuart, duquesa de Alba, y Luis Martínez de Irujo, ha utilizado este libro para sacudir los cimientos de su estirpe, exorcizar viejos demonios familiares y reflexionar sobre su vida en palacio, con sus privilegios y sus tristezas.

"Este libro lo he escrito por la necesidad de compartir mi verdadero ser con la humanidad y no tener que seguir probando mi inocencia, puesto que he tenido que sufrir mi condición de persona de interés público porque un pequeño sector se ha esforzado en mostrar una imagen que no soy, algo que me ha dolido mucho", explicó el autor del libro, editado por La esfera de los libros.

Aunque en la presentación no concretó nada sobre su familia, excepto el momento en el que lloró al recordar a su padre, a lo largo de las 300 páginas del libro Martínez de Irujo sí es explícito a la hora de denunciar la falta de cariño que sufrió en su infancia o su desaprobación al matrimonio de su madre con Jesús Aguirre. Ninguno de sus hermanos acudió a al presentación. Con él estaban su pareja Bárbara Mirjan y sus hijos, Luis y Amina.

Pese a todo ello, cree Martínez de Irujo que hoy en día es una persona "reparada emocionalmente" gracias a sus "dolorosos esfuerzos" de enfrentarse a "la dura realidad", algo que asegura hizo en esta autobiografía, en cuyo proceso de escritura lloró "muchísimo". En el libro se sincera sobre algunos de los episodios más oscuros, como aquellos relacionados con sus adicciones, de las que se recuperó gracias al deporte.

"El ser humano se forja en el sufrimiento y si, de alguna forma eres diferente, te sales de lo estipulado o tienes algún condicionante singular, se paga un precio muy alto, se nazca donde se nazca", explicó el aristócrata.

El duque de Arjona también reflexiona en el libro sobre la relación con sus hermanos mayores. "He aceptado que mis tres hermanos mayores —Carlos, Alfonso y Jacobo— no me quieren, me lo han demostrado con creces", confiesa amargamente en uno de los capítulos.

'De Cayetana a Cayetano' también revela toda la verdad sobre su historia de amor con mujeres tan importantes en su vida como Genoveva Casanova, la madre de sus hijos Luis y Amina, o Mar Flores, a la que ha definido como "la horma de su zapato" al darle de "su propia medicina" mientras duró su romance. Otro idilio que no ha pasado desapercibido y sobre el que también habla el hijo de la duquesa de Alba es el que casi le convierte en miembro de la Familia Real. El jinete mantuvo hace décadas un noviazgo secreto con la infanta Elena que duró tres meses.

"Este libro refleja valentía, honestidad y la infatigable lucha de un ser humano por encontrar su libertad", ha continuado Martínez de Irujo, que ha recordado que todos sus hermanos son "un pedacito de Alba de por vida".

CONTRARIO AL MUSEO

El autor se ha mostrado contundente contra la conversión del palacio de Liria de su infancia en un museo: "Empiezo el libro hablando de la gran fecha histórica que fue la reapertura del palacio de Liria, que eso conlleva un compromiso histórico con nuestro abuelo Jacobo, con nuestra madre Cayetana. Por eso no puedo estar de acuerdo en que se haya convertido en un museo".

Durante el acto estuvo arropado por Luis María Ansón, catedrático de la Real Academia Española, amigo de la familia y autor del prólogo del libro. Ansón habló de una obra escrita "con una sinceridad acongojante" y expresó su admiración por el autor: "Ninguno de los que estamos aquí podríamos pensar que un niño rodeado de todos los juguetes y de todas las comodidades se puede sentir infeliz".

También han estado presentes su editora, Ymelda Navajo, y Enrique Moreno Morales, médico que le ha curado en varias ocasiones y cuyas palabras de admiración a "la enorme capacidad de superación" de Martínez de Irujo hicieron llorar al autor, que ha confesado que durante su último ingreso hospitalario no ha recibido la visita de ninguno de sus hermanos.

A pesar de las tristezas por la ausencia paterna desde niño y la materna en muchas ocasiones, Martínez de Irujo decidió dedicar el libro a sus padres: "Estos pasajes de mi vida, que con toda humildad y sinceridad relato, van dedicados a mis padres, porque les adoraba".