El diestro Cayetano Rivera Ordóñez, herido de carácter grave en el transcurso de la corrida celebrada ayer en la plaza gaditana de El Puerto de Santa María, se encuentra "sin fiebre" y evoluciona favorablemente, aunque ha pasado la noche "muy molesto".

"Los médicos le han visitado este mediodía, comprobando que la herida está normal. La cornada tiene tres trayectorias, pero ha sido 'limpia', sin afectar vasos ni músculos importantes", dijo a EFE una fuente cercana al torero.

"Parece mentira pero ahora lo que más le duele a Cayetano es la interrupción que supone esta cornada. Volver a torear es su principal preocupación, y en este sentido no para de quejarse, preguntando a cada instante cuándo estará de nuevo en el ruedo", añadió el informante.

Cayetano fue alcanzado por su primer toro, tercero de la tarde, cuando toreaba con la muleta sobre el pitón izquierdo. Operado en la enfermería con anestesia epidural, se le apreció "una herida en el tercio medio, cara interna del muslo izquierdo, con tres trayectorias. Una ascendente, de seis-ocho centímetros; otra en dirección superinterna, de doce-quince centímetros, y otra descendente, de cinco centímetros".

"La trayectoria superinterna -según el parte médico- contunde y diseca la vena femoral, produciendo desgarros en abductores y en vaso interno. Se procedió al cierre y drenaje de las trayectorias. Pronóstico grave. Tras ser operado fue trasladado a la Clínica Jerez, de Jerez de la Frontera (Cádiz), donde se encuentra ingresado.