Se despidió llorando y diciendo que sentía como si se hubiera hundido de nuevo el Titanic. Ya se consolará: con el dinero que gana podría comprarse unos cuantos. La canadiense Celine Dion, icono de la canción romántica desde que diera voz al naufragante amor de Leonardo DiCaprio y Kate Winslet, acaba de decir adiós a cinco años de claustro artístico en el Caesar´s Palace de Las Vegas. Dice que ahora quiere cuidar a su hijo, la misma razón que esgrimió para rechazar inicialmente esta oferta. La noche de su adiós, dirigiéndose a un público enfervorecido que llegó a pagar 1.300 euros por una entrada, reflexionó: "Quería más éxito como madre que como cantante, pero la experiencia valió la pena". Desde luego que la valió: 300 millones de euros desde marzo del 2002 y tres millones de almas retratándose en taquilla.

GIRA MUNDIAL Tampoco ahora el cuidado de su hijo obstaculizará su gira mundial, que cubrirá 25 países y está montada en torno a su nuevo disco, Taking chances, donde se ha dejado dar un maquillaje euro-dance.

Nada es casualidad. Ni la despedida de Celine Dion en Las Vegas, coronada con la aparición en el escenario de su hijo René Charles, de 7 años, escuchando las promesas protectoras de su madre. Ni la inclusión del DVD Un nuevo día, con una selección de sus mejores gorgoritos en Las Vegas acompañando su nuevo disco. Ni el anuncio, pocos días después, de que la diva y su retoño grabarán juntos un disco de versiones techno de sus temas más conocidos. Ni la aparición de madre e hijo para protagonizar juntos la tradicional ceremonia de iluminación del gigantesco árbol navideño del Rockefeller Center de Nueva York. Ni un cabo suelto.

Celine parece querer cuidar a su hijo preparándole el camino al estrellato que a ella tanto le costó desde que saliera de aquel suburbio de Quebec. Pero de momento, la estrella es ella. La pasada semana The guardian se hacía la gran pregunta: ¿pero quién compra los discos de Celine Dion? En realidad no es fácil identificar a su parroquia, pero sí hacerse una idea viendo el alto poder adquisitivo de los países donde Taking chances ha arrasado en las listas: Canadá, Japón, Francia, Dinamarca, Suiza, Suecia, EEUU, Austria y Nueva Zelanda.

RUMORES PROMOCIONALES Los insistentes rumores en internet sobre el suicidio de Celine Dion, supuesta víctima de una anorexia galopante, también han sido aprovechados por la diva para autopromocionarse. En vez de pasar, entra al trapo: "Tuve que llamar a mi madre para decirle que no estoy muerta. Enloquecí". Todo es válido para empujar un nuevo disco. Taking chances debutó en el número tres de las listas en EEUU, pero perdió la batalla con Alicia Keys, que esa primera semana vendió 500.000 discos más. Pero paciencia. René Angelil, el mánager y marido de la diva, es un crack.