El diestro, de 86 años, se recupera en su finca sevillana de un tumor maligno en la laringe que a punto ha estado de costarle la voz. «El cáncer ha desaparecido completamente. Lo cogimos a tiempo», ha asegurado Carmen Tello, su esposa, de 64 años. Desde hacía meses se sabía que el Faraón de Camas estaba enfermo. Se le vio desmejorado cuando acudió al teatro de la Mestranza de Sevilla a finales de febrero para recoger el título de Hijo Predilecto de Andalucía. «En ese momento ni siquiera sabía si iba a poder recoger el nombramiento. Había terminado días antes la radioterapia y lo ha pasado muy mal con los efectos secundarios». A principios del 2020, en una revisión rutinaria, el médico le diagnosticó un cáncer de laringe, aún incipiente. «Empezó en enero y le han dado 38 sesiones de radioterapia. Ya está recuperado por completo Ha empezado a recuperar la voz y ahora está confinado en casa, como todos».