La flamante y bella secretaria de Estado de Asuntos Exteriores y Derechos Humanos del Gobierno francés, Rama Yade, se ha convertido en la estrella del Ejecutivo nombrado por Nicolas Sarkozy. Nacida en Senegal y con tan solo 30 años, Yade es la primera mujer negra que entra en la cúpula política de la República. Si a ello se añaden sus dotes de comunicación, su estilo y su físico de modelo, no es de extrañar que haya seducido a los franceses.

Que se trata de una mujer poco convencional no solo salta a la vista. Esta musulmana educada en una escuela católica y casada con un socialdemócrata hijo de un conocido cantante judío encarna el sueño de los más de cuatro millones de inmigrantes que viven en Francia. Miembro de una familia de cuatro hermanas, Rama llegó a Francia a los ocho años. Un año después, su padre --que fue secretario del antiguo presidente de Senegal Léopold Sédar Senghor-- abandonó el domicilio familiar y la madre tuvo que mudarse y criar a sus hijas en la banlieue parisina.

SIN MARCAS La clase y la elegancia de Yade no tienen pues nada que ver con el glamur que se respira en la alta sociedad de París. La nueva secretaria de Estado nunca ha vestido de marca y se abastece en cadenas de precios accesibles, como H&M, Promod y Zara.Jura no haber pisado nunca una boutique cara. "Eso me incomoda", afirma esta recién llegada a la élite del poder. Siempre dentro de una línea seria, de trajes chaqueta oscuros y discretos, pero de líneas modernas.

Junto con la ministra de Justicia, Rachida Dati, de origen magrebí --otra musulmana formada en la escuela católica--, Yade fue la revelación de la campaña electoral de Sarkozy. Ambas han salido del gueto, como la expresidenta de la asociación Ni putas ni sumisas Fadela Amara, una socialista hija de inmigrantes argelinos convertida en Secretaria de Estado para las Ciudades. El resto de las 11 mujeres del Gobierno --siete de ellas ministras-- está integrado por políticas de trayectoria y estilo clásico, a excepción de Christine Lagarde y de Nathalie Kosciusko-Morizet.

Procedente del mundo de la empresa, Lagarde es la primera mujer que ocupa la cartera de Economía en Francia. Con 34 años y procedente del mundo de la ecología, Kosciusko-Morizet aporta el toque ultrafemenino. Todas se identifican con el estilo de Sarkozy. Yade se ve reflejada en el presidente, hijo de inmigrante. En el universo sarkozista ya se habla de ella como la futura Condoleezza Rice.