La actriz británica Deborah Kerr, protagonista de clásicos del cine como "De aquí a la eternidad" y "El Rey y yo", falleció a los 86 años de edad, informó hoy su representante. Kerr, que padecía Parkinson desde hacía varios años, murió el martes en el condado de Suffolk, en el sureste de Inglaterra.

La intérprete, casada con Peter Viertel y madre de dos hijas, vivió en Suiza pero regresó a Inglaterra para estar cerca de sus familiares cuando los síntomas de la enfermedad comenzaron a agravarse. Nacida en Helensburgh (Escocia) en 1921, la actriz intervino en numerosos filmes británicos antes de dar el salto a Hollywood en 1947, donde pronto se convirtió en uno de los nombres imprescindibles de la cartelera estadounidense.

Kerr fue candidata en la categoría de mejor actriz en seis ocasiones, dos de ellas tras haber interpretado dos de los papeles que le reportaron mayor reconocimiento: "De aquí a la eternidad" (1953), de Fred Zinnemann, junto a Burt Lancaster, y "El Rey y yo" (1956), al lado de Yul Brynner.

La famosa escena en la playa de Kerr junto a su compañero de reparto Burt Lancaster en "De aquí a la eternidad" es una de las imágenes más icónicas del mundo del cine, y en la época llegó a rozar lo escandaloso. Otras de sus películas fueron "Tú y yo" (1957), de Leo McCarey, "Bonjour tristesse" (1958), de Otto Preminger, o "Vida y muerte del Coronel Blimp" (1943), de Michael Powell y Emeric Pressburger.

En 1994, Kerr recibió un Oscar honorífico por su contribución a la industria cinematográfica.