Centenares de amigos y familiares despidieron el martes a la actriz Farrah Fawcett, fallecida el pasado jueves a consecuencia de un cáncer de colon. El funeral se celebró en la catedral Nuestra Señora en Los Angeles, que había sido decorada con flores blancas y naranjas, y que permaneció cerrada al público y a los medios de comunicación.

Durante el oficio religioso, el también actor y pareja de Fawcett, Ryan O´Neal (en la foto), y el hijo de ambos, Redmond, que obtuvo un permiso especial para salir un par de horas de la cárcel donde purga una condena por problemas con drogas, leyeron pasajes de la Biblia. O´Neal, que pidió matrimonio a una de las estrellas de la serie Los ángeles de Charlie unos días antes de su muerte, ayudó a llevar el féretro hasta el cementerio llorando desconsoladamente.

También asistieron el padre de la intérprete, James Fawcett; una de sus compañeras en la serie que la llevó a la fama, Kate Jackson; la actriz y mejor amiga de Farrah, Alana Stewart, y el hijo que O´Neal tuvo con Joanna Moore, Griffin.