George Bernard Shaw se integra en la colección de plumas Montblanc a grandes escritores. El dramaturgo irlandés cobra cuerpo en una pieza de laca marmolada con brillantes anillos en plaqué platino. El espíritu del Nobel permanece en su obra Pigmalión y las sentencias que dejó para la posteridad. El jueves, Hubert Wiese, consejero delegado de Montblanc España, la presentó en una cena.