El actor Tom Cruise no consigue quitarse de encima la polémica que rodea a la película Valkyrie, en la que interpreta a un oficial nazi que intentó matar a Hitler, y que aún no se ha estrenado. Una decena de extras alemanes reclaman a Cruise 7,4 millones de euros de indemnización por las heridas sufridas en el accidente de un camión militar el pasado año durante el rodaje. Los actores resultaron heridos de diversa consideración, cuando, vestidos con el uniforme del Ejército alemán, cayeron del vehículo al abrirse una trampilla trasera en una curva cerrada en el centro de Berlín.

Aunque la Oficina Federal de Seguridad Laboral alemana ha dictaminado que fueron los propios extras quienes provocaron el siniestro, los figurantes insisten en acusar del suceso a la productora, United Artist, propiedad del actor. Los actores han puesto el asunto en manos de un despacho de abogados de Berlín, que amenaza a Cruise con una demanda si antes no se llega a un acuerdo extrajudicial con los afectados.

Este es un problema más que añadir a la larga lista de incidentes surgidos entorno a la película Valkyrie. Primero se denegó el permiso para rodar en el escenario original donde se ejecutó al conde Claus Schenk Gran von Stauffenberg (a quien encarna Tom Cruise), que en la actualidad es la sede del Ministerio de Defensa alemán. Finalmente, las autoridades alemanas concedieron la autorización.

LOS DESCENDIENTES Cruise se tuvo que enfrentar también a las críticas de los descendientes de Stauffenberg, que pusieron el grito en el cielo por no considerar apto al actor para interpretar al oficial nazi por su militancia en la Iglesia de la Cienciología.

Otro de los incidentes del rodaje fue la destrucción de algunas de las escenas más importantes de la película, las filmadas en el Bendlerblock, el escenario original donde ejecutaron al conde nazi tras fracasar su atentado contra Hitler. Según el diario Bild, la destrucción de los rollos se debió a un sabotaje.

Valkyrie, dirigida por Brian Synger, fue rodada con un presupuesto de 56,6 millones de euros. El estreno ha sufrido varios retrasos. Estaba previsto que se estrenara en Estados Unidos el pasado mes de junio, pero finalmente se decidió aplazarlo hasta el 13 de febrero del 2009. Recientemente, no obstante, los productores han vuelto a cambiar la fecha y la adelantan al 26 de diciembre de este año, para que pueda aspirar a las nominaciones de los Oscar del 2009.