La eterna soltera de Hollywood, Jennifer Aniston, está pasando el verano en Nueva York enfrascada en el rodaje de la película The Bounty, una comedia romántica en la que comparte protagonismo con Gerard Butler, quien se dio a conocer con el filme 300. Aunque la ex de Brad Pitt explota su vena cómica en el cine, parece que la realidad es bien distinta, pues provoca bostezos a su colega.