Leonor se convirtió ayer en la reina de la regatas. La pequeña salió a navegar con su madre, Letizia, y con su abuela, la Reina, en el Somni para ver como regateaba su papá. La niña, con un vestido a rayas y la melenita rubia suelta, no paró de trotar en el yate. Saltó de un asiento a otro mientras saludaba a las lanchas de los periodistas. La princesa de Asturias y la reina Sofía se acercaron hasta el CAM, donde estaba el príncipe Felipe, para animarle. Letizia cogió a su primogénita para que saludara a su papá. El Príncipe, al timón del velero, le mandó besos a su niña, que no paraba de llamarle. Después de saludarlo, la lancha Somni se dirigió hacia Porto Pi, y desde allí, al palacio de Marivent.

La pequeña Sofía se quedó en palacio. La niña, que apareció en el Club Náutico el martes, está irreconocible. Desde la pasada Semana Santa no se la había podido ver en público y ha cambiado mucho. No extraña nada las cámaras. Al contrario, la pequeña saluda con su manita a la prensa mientras sonríe.

Letizia comentó que su hija pequeña había empezado a dar los primeros pasos y que no tardará en andar. Las dos hermanitas son tan diferentes como la noche y el día, mientras Leonor es extrovertida y risueña, Sofía es, de momento, más tímida. La tercera jornada de la Copa del Rey empezó con una hora de retraso debido a la escasa fuerza del viento. Letizia y la Reina se acercaron al Bribón, que patronea el Rey, aunque ayer no se embarcó. Las infantas Elena y Cristina todavía no han llegado a Palma y no se espera verlas hasta medidados de agosto.

CRISTINA, EN MOZAMBIQUE La familia Urdangarín se encuentra de vacaciones en Mozambique. La infanta Cristina ha querido que sus hijos conozcan la realidad de estos países. Cristina ha viajado varias veces a Mozambique en calidad de directora del Area Social de la Fundación La Caixa para firmar un acuerdo que extiende el acceso a las vacunas de la malaria en los países pobres. Cristina e Iñaki tienen previsto viajar el día 6 a Pekín para asistir a los Juegos Olímpicos. Por su parte, la infanta Elena ha pasado unos días en EEUU y, según algunas fuentes, dedicará parte del mes de agosto al traslado a su nueva vivienda en el barrio madrileño del Niño Jesús, un ático de 468 metros cuadrados, con cinco dormitorios, varios cuartos de baño, salón, comedor y zona de servicio. El piso está valorado en 1.800.000 euros y tiene como vecinos a la diputada del PP Celia Villalobos, la actriz Lina Morgan y el dibujante Mingote.

En septiembre, la primogénita de los Reyes trabajará en el Instituto de Acción Social de Mapfre. En cuanto a Jaime de Marichalar, que este año no estará presente en el veraneo de la familia real, no corren buenos tiempos para él. La comisión de Vivienda y Urbanismo del Ayuntamiento de Soria ha dictaminado favorablemente el expediente de expropiación de unos terrenos de la familia Marichalar.