Un nuevo terremoto amenaza la estabilidad de Berlusconi. Noemí Letizia, la joven de 18 años, que provocó el divorcio del primer ministro italiano, ha desembarcado en Porto Rotondo (Cerdeña), la localidad en la que está situada Villa Certosa, la finca donde Il Cavaliere suele celebrar guateques rodeado de esculturales jovencitas. Si, como Noemí afirma, ha ido allí "por casualidad", Berlusconi debe estar de los nervios, ahora que había empezado a tener un respiro con los escándalos que le persiguen.

El caso es que la hija del mandatario italiano --es así como la definió Berlusconi cuando se destapó su presencia en el 18º cumpleaños de la chica-- se encuentra en la isla desde el domingo y, aparte de exhibir cuerpazo en biquini y chapotear en las cristalinas aguas de Cerdeña, se la ha podido ver bailando con desenfreno con un grupo de amigos en una discoteca al aire libre de la isla.

La joven que llamaba "papi" al primer ministro asegura que no entiende el revuelo que su presencia ha causado en la localidad. En declaraciones recogidas por La Repubblica y Corriere della Sera, Noemí se pregunta: "¿Y qué hago? ¿Me escondo? Porto Rotondo me gusta muchísimo. Un mar estupendo. Gente guapa. He conocido muchos famosos. Pero, ¿por qué decís que al presidente mi presencia aquí le podría suponer algún problema? No, ¿qué tiene que ver?".

Letizia, que conoce bien Villa Certosa porque pasó allí el pasado fin de año, da la impresión de pasar de todo y levanta divertida los brazos cuando el pinchadiscos de la discoteca playera la presenta como "la única mujer del mundo que se permite llamar papi al presidente".

La joven ha lucido sugerentes vestidos en la isla, como uno blanco anudado al cuello, e insiste en que está allí de vacaciones "por su cuenta". Noemí ha desmentido que tenga un nuevo novio. "Los periódicos inventan muchas cosas sobre mí", ha dicho la joven italiana.

MANDATARIO DESAPARECIDO Y mientras, el primer ministro no se deja ver por Porto Rotondo. Es como si se lo hubiera tragado la tierra. Algunos medios aseguran que en un intento de lavar su imagen ha cambiado Villa Certosa por una finca alquilada en L´Aquila, la localidad que en abril sufrió un terremoto que costó la vida a 306 personas. Otros medios especulan que el mandatario va y viene a Villa Certosa durante este mes, aunque nadie de la zona asegura haberle visto por allí.