Pascal Henry sigue escondido, pero algunos aún no se han olvidado del gurmet que se esfumó el pasado 12 de junio tras cenar en El Bulli, la etapa 40 en su periplo por todos los restaurantes de tres estrellas Michelin. Una agencia de alquiler de vehículos de Ginebra, donde residía, le ha denunciado ante la policía por el robo de un coche, ya que el misterioso suizo aún no ha devuelto el turismo que utilizó durante su viaje, según informó ayer el diario Le Matin. Henry alquiló el coche del 9 de mayo hasta el 19 de junio, lo que concuerda perfectamente con su plan de viaje. Hasta ahora, la policía suiza no actuaba porque consideraba su desaparición voluntaria. Ahora, tras la denuncia por robo, podría localizarlo y detenerlo.