La reina Isabel II se dispone a competir con los productores de espumosos británicos y de otros países y sacará al mercado un vino producido en sus terrenos, que se llamará Windsor. La próxima semana se plantarán 16.700 vides en una parte del gran parque que rodea al castillo de Windsor, en el condado de Berkshire, que fue, en tiempos de la reina Victoria, un terreno de caza. Las variedades utilizadas serán chardonnay, pinot noir y pinot meunier, según adelanta el diario The Daily Telegraph. Stephen Skelton de asesor De acuerdo con el periódico, el propio marido de la Reina, el duque de Edimburgo, está involucrado en el proyecto, que cuenta además como asesor con Stephen Skelton, un enólogo que plantó en 1976 las primeras vides en Chapel Down, el mayor productor de vino de este país. La noticia de que un personaje tan conocido en todo el mundo como Isabel II va a producir vino ha sido acogida con entusiasmo por el sector vinícola británico. "Es el mayor impulso que podría recibir la industria vitivinícola inglesa. Es fantástico", ha declarado Bob Lindo, de las bodegas Camel Valley. Un sector al alza Si en 1984 solo había 325 hectáreas dedicadas a la producción de vino, en los últimos años se ha registrado un fuerte incremento de la superficie dedicada a vides. "Tenemos un 75% más de tierra dedicada a la vid que en el 2004. Según cifras oficiales son 1.323 hectáreas, pero creemos que la cifra real es mucho más alta", explica Julian Trustram Eve, del grupo de productores ingleses de vino. Cuatro millones de botellas el año pasado En el 2010, el vino de Inglaterra tuvo su mejor año hasta ahora con una producción equivalente a 4 millones de botellas y superó el anterior récord de 3,5 millones. Dado que las nuevas vides necesitan tres años en producir uvas susceptibles de convertirse en vino, pasará todavía algún tiempo antes de que los británicos puedan brindar con un espumoso Windsor.