La revista Forbes ha coronado al rey de Tailandia, Bhumibol Adulyadej, como el monarca reinante más rico del mundo, en la lista de soberanos con fortuna, y en la que el rey Juan Carlos brilla por su ausencia.
Bhumibol tiene un patrimonio estimado en 23.000 millones de euros, que incluye una propiedad de 3.493 hectáreas en Bangkok y acciones en la cementera nacional Siam Cement y en el banco Siam Comercial. El rey de Tailandia accedió al trono el 9 de junio de 1946, tras la misteriosa muerte de su hermano mayor, Ananda Mahidol.
En segundo lugar de los soberanos o mandatarios más ricos aparece el presidente de los Emiratos Arabes Unidos y emir de Abú Dabi, el jeque Bin Zayed al Nahyan, que ha amasado su fortuna con los ingresos petroleros. También se ha hecho rico con las exportaciones de petróleo el rey de Arabia Saudí, Abdullah bin Abdulaziz, que ocupa la tercera posición. En junio del 2007, el rey de España otorgó al monarca saudí el Toisón de Oro, la máxima condecoración que puede conceder Juan Carlos, medida que fue criticada debido al nulo respeto de los derechos humanos en Arabia Saudí.
La fortuna del sultán de Brunei, Haji Hassanal Bolkiah, procedente del petróleo y el gas, le sitúa en el cuarto lugar de la lista. El sultán de Brunei es, junto con el rey de Marruecos, Mohamed VI, el único soberano que ha visto reducida su fortuna por el descenso de la producción de barriles de crudo en su país.
El emir de Dubai, Mohamed bin Rashid al Maktoum, ocupa la quinta posición. Está casado con Haya, hija del rey Hussein de Jordania, amiga íntima de los hijos de los reyes de España. El emir tiene 16 hijos con sus anteriores mujeres.
NEGOCIO FAMILIAR El sexto puesto de la lista lo ocupa el príncipe Hans Adam de Liechtenstein, con una fortuna que debe principalmente al negocio familiar, el banco LGT, aunque también posee 20.000 hectáreas en Australia y varios palacios del siglo XVII en el centro de Viena. Después del emir de Qatar, Hamad bin Khalifa Al-Thani, aparece el rey de Marruecos, Mohamed VI, que ha ganado menos este año debido a la ralentización del crecimiento económico de su país.
Alberto de Mónaco es el siguiente, gracias a sus negocios inmobiliarios y a su participación en el Casino del principado. Mientras, la reina Isabel II de Inglaterra, propietaria de varios palacios, entre los que se encuentran Buckingham y Balmoral, aparece en la duodécima posición, con un patrimonio de 440 millones de euros. Dos puestos más abajo se sitúa Beatriz de Holanda, que es propietaria de varias fincas, casas y acciones.
