Rambo ha vuelto. Y lo ha hecho con más sangre que nunca. Porque el mundo es violento. Porque la guerra es el infierno. Porque la realidad es así de cruda. Sylvester Stallone utilizó ayer estos tres argumentos para defender la nueva entrega del soldado más hormonado de la historia del cine: John Rambo. Vuelta al infierno, que se estrena el viernes en España. En la película, Rambo acepta el reto de llevar a unos misioneros hasta Birmania, asediada por la guerra civil. "Las otras películas de Rambo han sido más del estilo de Hollywood. Esta es más dura y difícil. No me da miedo que me tachen de violento porque la película cuenta una realidad. La guerra es lo más violento que hay en el mundo", dijo ayer Stallone (foto).