A primera vista pueden parecer un grupo de modelos, pero en realidad es una nueva generación de tenistas que conquistan el mundo de la raqueta con su talento y su belleza. Ricas, famosas y astutas, compaginan la escena deportiva y la publicitaria, y fuera de la pista convierten sus aficiones en negocio.

Maria Sharapova, quinta mejor tenista del mundo y de una belleza insultante, es perseguida allá donde va. También es una de las deportistas que más ceros añade a su cuenta corriente. Pero no todo es dinero. Después de firmar un contrato por cuatro años con Sony Ericsson, la nueva Kurnikova , que contribuye a recaudar fondos para los afectados de Chernóbil, se deja tentar por el glamur de las pasarelas: entre sus planes está crear una línea de ropa. "Y no solo para el mundo del tenis", puntualiza.

SEGUNDA VOCACION La número cuatro mundial, Jelena Jankovic, tiene una segunda vocación: el cine. La serbia ha recibido una oferta para interpretar un papel en una serie de su país. "Iré a clases de interpretación. Dicen que tengo talento", declaró.

También hay quien se declina por las artes, como Maria Kirilenko, que tuvo que decidirse sobre si seguir su carrera como bailarina o como tenista. Hoy está convencida de que una ayudó a la otra. "Me gustaba especialmente la danza", explicaba la rusa al rotativo Herald Sun .

La número uno del mundo, Justine Henin, prefiere la música moderna. La belga comenzó recientemente a tomar clases de hip-hop y de momento no se sabe si esta afición va a ir más allá. Pero son las hermanas Williams, que marcan tendencia dentro y fuera de la pista, las que llevan más tiempo volcadas en sus negocios. Hace ya cuatro años que Serena presentó su primera colección en un concurrido desfile que tuvo como principal estrella a su hermana mayor, Venus, quien se encargó de lucir los modelos en la pasarela. Serena se declaró dispuesta a diseñar su propia ropa de tenis. "Estoy trabajando con Nike para crear mi línea, así que hago los dos trabajos al mismo tiempo", declaró.

Venus, que estudió moda en el Instituto de Arte de Fort Lauderdale en Florida, descartó entonces dedicarse a la pasarela. Sin embargo, no tardó demasiado tiempo en presentar su línea bajo la marca EleVen.