Más de 50 personas han muerto en los últimos días en Haití como consecuencia de una epidemia de diarrea acompañada de vómitos debido a la mala calidad del agua potable, según las autoridades sanitarias locales.

"Hemos registrado unas 51 o 52 muertes a lo largo del cauce del Artibonita, que transcurre por el centro y el norte del país. Se trata de una epidemia debido al agua utilizada en los hogares de estas regiones", ha explicado Ariel Henry, director del gabinete del ministro haitiano de la salud.

Según las radios locales, la mayoría de los fallecidos se han registrado en los hospitales de Saint-Marc, a un centenar de kilómetros de la capital, en las localidades próximas a Port-au-Prince.

El país aún no se ha recuperado del violento terremoto que asoló la isla el pasado 12 de enero y que provocó miles de muertos. Una alta funcionaria de las Naciones Unidas ha denunciado hoy los niveles de insalubridad, la inseguridad y la falta de perspectiva económica en que aún subsisten millones de personas.

La subsecretaria general para asuntos humanitarios y coordinadora adjunta de emergencia de la ONU, Catherine Bragg, alerta de que todos los días 1,1 millones de personas reciben 6.000 metros cúbicos de agua y que desde el pasado 12 de enero 4,3 millones de personas han recibido comida.

Aseguró, asimismo, que más de 1,5 millones de personas recibieron albergues de emergencia y 2,1 millones se beneficiaron de artículos diversos para su servicio cotidiano. Más de 1,3 millones de personas siguen viviendo bajo carpas.