Bucarest El dictador rumano Nicolae Ceausescu vuelve a ser noticia tras haber sido atendida la reclamación de su hijo y su yerno para comprobar el ADN de los restos que hay en su nicho. Ayer se exhumó la tumba para empezar los trabajos que durarán hasta seis meses. El matrimonio Ceausescu fue ejecutado en 1989 tras la caída del régimen stalinista. Se sospecha que en el cementerio Ghencea de Bucarest solo está la mujer, y que Ceausescu fue incinerado. Esto ha recordado a Rumanía los 24 años de oscura y cruenta dictadura que terminó la Navidad de 1989 tras una revolución que dejó más de mil muertos.